Cerca de 300 hinchas de River pasaron la fría madrugada a metros de la concentración de Belgrano. La idea fue no dejar descansar a los jugadores.

No hubo incidentes, sólo ruido producto de cantos, bombos y pirotecnia. Sigue en el Monumental.

Luego de acompañar al plantel de River desde Don Torcuato hasta el Monumental, los hinchas del Millo no se fueron a descansar pensando en la final que se jugará en Núñez. Todo lo contrario. Fueron a no dejar descansar. ¿A quién? A los jugadores de Belgrano, claro. Alrededor de 300 almas se concentraron a metros de donde concentra el Pirata cordobés y, a fuerza de cantos y pirotecnia, intimidaron la paz de Zielinski y sus dirigidos.

“No vas a dormir, no vas a dormir, no vas a dormir che Belgrano, no vas a dormir”, fue unos de los hits que entonaron con más ganas que sintonía, para hacerse escuchar y dejar en claro cuales eran sus objetivos. Los hinchas no solo gritaron, sino que también se apoyaron en bombos, trompetas y pirotecnia, apuntando los famosos morteros cerca de las ventanas del Hotel NH, para que el estruendo sea aún más cercano de los oídos de los jugadores.

La concentración arrancó en el Hindú Club, con cerca de 2.000 hinchas; luego algunos acompañaron al plantel de Jota Jota hasta el Monumental, y otros siguieron su raid hasta Bolívar y Alsina, a metros de la concentración de Belgrano. Allí, pasada la medianoche, no había un operativo para prevenir, pero rápidamente llegaron diez patrulleros y un camión hidrante para mantener el orden. Por suerte fue sólo ruido, cero incidentes. El partido, los hinchas lo arrancaron en el frío de la madrugada bonaerense. Sigue en el Monumental.